La contaminación en las grandes ciudades y países es una realidad. Por lo que Copenhague quiere combatir la congestión de la ciudad utilizando trenes como servicio de paquetería. 

Un proyecto novedoso para reducir la contaminación

No es de extrañar que las ciudades quieren crear proyectos sostenibles para reducir la polución. En el año 2018, China decidió construir un aspirador gigante para luchar contra la contaminación diaria. 

Contaminación de una fábrica

 

Y gracias a la investigación de dos arquitectas Meggan Collins y Jana Possehn, han encontrado la manera de reacondicionar los trenes y transformarlos en un servicio de transporte de paquetería y no sólo de personas.

¿En qué consiste el proyecto?

El proyecto se centra en buscar nuevas formas de abordar el problema de la contaminación en determinados puntos de la ciudad que son más contaminantes. 

Es por ello que a través de un mapa en el que se conecten metros en diferentes partes de la ciudad, se entregarán las mercancías a los consumidores. 

Esto se haría mediante unos centros de distribución en los que los paquetes serán entregados a través de un conducto. Estos entran en el sistema de metro de tal forma que se libera la circulación en la parte de arriba de la ciudad. 

El consumo creciente en línea aumenta la contaminación

Este proyecto surge como una necesidad y como una respuesta al ritmo frenético de las ciudades y a lo que esto provoca. Vivimos en una sociedad en la que compramos a través de Internet de manera diaria. 

Pero, ¿qué impacto tiene esto en el medio ambiente? No nos lo planteamos, pero lo cierto es que el consumo masivo y el movimiento constante de empresas de paquetería, supone un impacto negativo en las ciudades. 

Y aunque el año pasado el agujero de Ozono se redujera a un mínimo histórico, no podemos bajar la guardia y debemos aprovechar la energía o infraestructura de otros sistemas de transporte para reducir el uso de vehículos en las ciudades, como plantea este proyecto.