En 2019, el agujero de ozono se ha reducido a un mínimo histórico. Si bien los fenómenos climáticos que contemplan este hecho continúan siendo un misterio, recientes estudios aseguran que el daño en la capa de ozono ha sido menor este año que en los anteriores.
En el siguiente artículo, podrás conocer a qué se debe este acontecimiento. La destrucción de la capa de ozono es una problemática que acarrea la humanidad desde el siglo XX. ¿Será esto una señal de un avance? Informate sobre todos los detalles a continuación.
El informe de la NASA
La NASA ha anunciado este nuevo descubrimiento en el comienzo de semana. El agujero de ozono creció hasta los 16, 4 millones de kilómetros cuadrados. A partir de allí, ha comenzado a contraerse hasta los 10 millones de kilómetros cuadrados, aproximadamente.
Como ha anunciado la NASA, dicha contracción es extremadamente inusual. Por lo general, el agujero de ozono permanece abierto hasta mediados de octubre antes de repararse en diciembre paulativamente. Eventos similares han acontecido en los años 1988 y 2002.
A su vez, Paul Newman, científico jefe de Ciencias de la Tierra en el Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA, ha comunicado que «es una gran noticia para el ozono en el hemisferio sur». De esta manera, la NASA destaca que este fenómeno repercute positivamente.
Sin embargo, Newman remarca que «es importante reconocer que esto se debe a temperaturas estratosféricas más calidas». A su vez, concluye que «no es una señal de que el ozono atmosférico esté repentinamente en una vía rápida hacia la recuperación», sino que es parte de un proceso mayor.
¿Por qué el agujero de ozono se ha reducido a un mínimo histórico?
La principal causa de esta reducción en el constante daño de la capa de ozono es la presencia de un cambio en el vórtice polar del hemisferio sur. Dicho vórtice ha causado una ola de calor a 20km sobre el territorio de la Antártida.
Por otro lado, el aumento de las temperaturas en la estratósfera —una porción específica de la atmósfera— ha ayudado a limitar las condiciones que generan la formación de químicos que afectan al ozono. Este aumento es conocido como calentamiento estratosférico repentino.
Al mismo tiempo, la población humana también ha interferido para reducir este daño. Si bien la utilización de químicos que degradan la capa continúan en uso por empresas multinacionales, también se han tomado medidas a nivel mundial para delimitar este agravante.
El daño en la capa de ozono permanece como una de las problemáticas que la población humana debe superar. No obstante, este fenómeno ayuda a reconocer las condiciones en las que se encuentra y los distintos mecanismos que pueden aplicarse para enmendar esta situación.
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