wmc16¡Que levante la mano quien no tenga hoy en día un smartphone!

Seguro que apenas a nuestro alrededor hay una decena de personas que están en esta situación.

Estamos en un concepto de aldea global en el que la tecnología avanza a tal velocidad que exige constantemente estar al día.

Por eso que estos días Barcelona haya acogido el Mobile World Congress es todo un lujo que deberíamos saber valorar.

La principales novedades y todos los avances que pronto tendremos en nuestra mano, estos días se han paseado, expuesto y curioseado en la ciudad condal. Allí se han podido ver cómo los coches están cada vez más conectados (Quizá deberíamos centrarnos más en conducir, pero bueno), materiales nuevos salidos del mismo Criptón, o tarjetas SIM integradas en el móvil ( ya era hora, que mi operador me cobra 5 euros cada vez que se
daña!!). Además, un nuevo Samsung!!!!, s7 o….¿ 7s? solo cambias el orden y ya has
cambiado hasta de sistema operativo).

Si que echo de menos que la compañía de la manzana se implique más en este tipo de eventos. Entiendo que quiera ser más elitista, o dar esa sensación de mayor exclusividad, pero a la hora de la verdad tiene que tener claro que está en el mismo sector, y que acabará usando la red 5G que se presenta ya como el futuro. No en vano hace tan solo un par de días, sus “compañeros de clase”, Microsoft, Facebook,o google entre otros, se han
unido a sus argumentos de defensa ante esa “petición” del FBI de hacker el móvil de San Bernardino. Así que deberían empezar a entender que está entre los monstruos de la tecnología, pero no solo.

Y no me entendáis mal, que uso la manzana hasta para controlar mis pulsaciones. Su tecnología me gusta como al que más. Su filosofía tanto.

Pero, dejando al margen esa ausencia de Apple, volvamos al MWC16. La tecnología nos lleva a una rapidez y una interacción cada vez más grande. Donde los móviles cada vez son de mayor tamaño, con wearables para interactuar de una manera más cómoda.
Y así introducimos un nuevo palabro que lleva ya un tiempo intentando llegar para quedarse. Wearable para todo, relojes, auriculares, pulsómetros, todo un amplio mundo de accesorios que irán incorporándose a nuestra vida diaria. Y todo en pos de hacernos la vida más cómoda. Relojes que controlan las calorías que consumimos al día, auriculares que intuyen que queremos oír, o gafas que nos permiten leer el periódico mientras parece
que estamos en el mundo real.

Da un poco de miedo ver hacia dónde va todo este mundo de tecnología, y más en un país como el nuestro, que aun no somos capaces de usar el chip del DNI para nada.

Cada vez un mundo más complejo donde tienes que ponerte el  apple watch, earpods , o añadir al bolso la batería auxiliar exterior. Todo ello para “simplificarnos” la vida. Eso si, mi bolso se ha vuelto más grande para poder llevar todos estos accesorios y tenerlos operativos en todo momento.

¿Llegaremos al punto en que con las lentes de contacto y un chip implantado en el brazo podamos realizar todas nuestras “ acciones sociales”? la pantalla directamente en el ojo y nuestro cuerpo como mando.

Entre tanto, el sabor que me queda del Mobile World Congress 2016 es de pequeños avances, de olvidadas baterías de mayor capacidad para nuestros teléfonos, y el de un país que vuelve a dar la nota y políticos que hacen peligrar que un evento de estas características pueda buscar otro lugar de ubicación.