Ante las nuevas políticas mundiales de independencia de combustibles fósiles, Arabia Saudí ha decidido trazar una nueva ruta económica para el país. Coral Bloom se convertirá en un enorme complejo turístico de lujo potenciado por energía verde y respaldado por una batería de gran magnitud.
Coral Bloom: la nueva pieza arquitectónica de Foster + Partners
El príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohammed Bin Salman, ha iniciado una impresionante iniciativa turística de la mano de Foster + Partners. El nuevo centro paradisíaco de lujo, Coral Bloom, se ubicará en la isla Shurayrah como parte del gran Proyecto del Mar Rojo de la nación árabe.
Foster + Partners ha elaborado un enfoque de isla de lujo con grandes espacios abiertos al aire libre en un mundo posterior a la pandemia por COVID-19. Coral Bloom contará con más de once hoteles y empleará una fusión de energía eólica y solar, respaldada por una batería absolutamente gigantesca con una capacidad de hasta mil megavatios por hora.
El concepto verde del nuevo complejo árabe sigue una ruta similar al reciente Apple Marina Bay Sands construido por la firma. Además, Coral Bloom se convertirá en la puerta de entrada a otras veintiún islas vírgenes que formarán parte de la experiencia turística del lugar.
«El almacenamiento de baterías es necesario para respaldar la resiliencia energética en todo el sitio, proporcionando la energía requerida por la noche cuando la generación solar no es posible. También garantizará el suministro en el caso de cortes cuando se produzcan paradas debido a posibles fallas o tormentas de arena que afecten la producción».
Foster + Partners
El objetivo es mantener y potenciar la belleza natural de Shurayrah
La visión para Coral Bloom va más allá de una gran batería y energía limpia. De hecho, la popular firma arquitectónica espera conservar la belleza natural de la isla e incluir impresionantes edificios que surjan entre las dunas bañados por las olas del mar.
La infraestructura hotelera será prefabricada fuera del lugar, para luego incluirla en el paisaje natural con largos paseos marítimos y embarcaderos. Además, algunas áreas de la isla, como playas y lagunas, serán remodeladas y adaptadas para proteger al complejo contra el aumento del nivel del mar.
«Los materiales que utilizamos y el bajo impacto que tienen aseguran que el entorno prístino esté protegido, mientras que las adiciones que hacemos a la isla sirven para mejorar lo que ya está allí, de ahí el nombre, Coral Bloom».
Foster + Partners.
Hasta el momento, no se han revelado más detalles acerca de esta gran pieza turística. No obstante, se espera que Coral Bloom y su impresionante batería estén recibiendo a sus primeros turistas durante el último trimestre de 2022.
Vía New Atlas