En los últimos años, los viajes en aviones en todo el mundo han ido tomando fuerza gracias a la comodidad y velocidad de transporte que estos ofrecen. Sin embargo, un reciente estudio indica que algunos aviones podrían estar liberando humo tóxico durante sus vuelos, envenenando así a los pasajeros.

Humo tóxico se filtra en el aire de los aviones

Esta semana una alarmante noticia acerca de las aerolíneas salió a la luz a través de una investigación publicada en Los Angeles Times. Al parecer sustancias químicas peligrosas en forma de humo tóxico se han estado filtrando dentro del suministro de aire de los aviones, intoxicando a los pilotos, tripulación y pasajeros.

Humo toxico podría afectar a los pasajeros en aviones.

De acuerdo con la publicación, las aerolíneas han minimizando y ocultando el problema de fuga de gases durante años. Los llamados eventos de humo se producen por fallos mecánicas que ocurren en la maquinaria del avión, generando sustancias dañinas que se infiltran dentro del sistema de distribución de aire por su contigüidad con el motor.

A largo plazo la exposición a este humo tóxico podría provocar enfermedades degenerativas, daño cerebral e incluso la muerte. Sin embargo, para la mayoría de los pasajeros los síntomas pueden ser mínimos y confundirse con los generados por el jetlag. Por lo que, no se le ha dado la verdadera importancia que la situación requiere.

Los investigadores estiman que en los vuelos previos a la pandemia estos eventos de humo se produjeron en alrededor de cinco vuelos por día en Estados Unidos. No obstante, los mismos destacan que a pesar de haberse reducido el tránsito aéreo producto del COVID-19 la situación aún persiste en muchas aerolíneas.

Actualmente, varias organizaciones han comenzado a preocuparse por reducir la huella de carbono que emiten los aviones, como el caso del nuevo biocombustible que utilizan los aviones de Microsoft. Sin embargo, la presencia de humo tóxico en los aviones que pueda envenenar a los pasajeros debería ser una situación ha atenderse con mayor premura.

Aerolíneas ignoran activamente los esfuerzos por resolver el problema

Hasta el momento, no se han realizado estudios a mayor escala acerca de los eventos de humo. Además, informar de estas situaciones sigue siendo voluntario y no una obligación de las empresas de vuelo. Boeing se ha negado a instalar sensores de calidad de aire, destacando que estos podrían usarse en su contra durante un juicio, según la publicación.

Algunos aviones están liberando humo tóxico.

El reciente artículo que confirma la presencia de humo tóxico en los aviones podría generar un enorme conflicto entre las aerolíneas y el sector de la salud. Esto sobre todo si ha sido una situación encubierta durante muchos años, afectando secretamente a millones de viajeros en todo el mundo.