En medio de las crecientes tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, NVIDIA se encuentra en una situación delicada. Estados Unidos ha impuesto una serie de sanciones tecnológicas al gigante asiático, y una de las víctimas más notorias es NVIDIA. Nuevos controles a las exportaciones amenazan con poner en peligro pedidos por valor de 5.000 millones de dólares que la empresa había contraído con compañías chinas.
Exportaciones en peligro: NVIDIA y las tensiones entre EEUU y China
La empresa con sede en Santa Clara ya había cumplido sus acuerdos con empresas chinas para el año en curso. Además, estaba tratando de adelantar los pedidos programados para 2024 antes de que las restricciones entraran en vigor a mediados de noviembre. Estos controles afectan directamente a componentes utilizados en la inteligencia artificial (IA) y son parte de los esfuerzos de Estados Unidos para evitar que China compita en el desarrollo de sistemas de IA.
Las autoridades estadounidenses enviaron una carta a NVIDIA informando que las restricciones sobre la venta de chips avanzados se aplicarían de inmediato. Grandes empresas chinas como Alibaba y Baidu habían reservado componentes por un total de 5.000 millones de dólares. La respuesta inicial de NVIDIA es que están adaptándose a estas restricciones y trasladando parte de las reservas a clientes en Estados Unidos, lo que no tendría un impacto significativo a corto plazo.
Sin embargo, Colette Kress, CFO de NVIDIA, ha advertido que vetar las exportaciones a China resultará en una «pérdida permanente» de oportunidades para la industria de semiconductores de Estados Unidos. En los últimos cuatro trimestres, NVIDIA ha ingresado alrededor de 22.000 millones de dólares en su división de centro de datos, que incluye estos chips avanzados. Perder a las empresas chinas como clientes probablemente tendrá un impacto en esos ingresos a medio y largo plazo.
Licencia para exportar
La nueva regulación publicada en octubre obliga a cancelar pedidos de tarjetas A800 y H800 hasta que NVIDIA obtenga una licencia para exportar estos componentes. Aunque no eran los chips más avanzados de NVIDIA, su exportación estaba permitida antes de esta nueva normativa.
En respuesta a las dificultades con NVIDIA, empresas chinas han comenzado a buscar alternativas. Esto incluye el uso de chips como los Ascend 910 de Huawei y los Siyuan 590 de Cambricon Technologies. Algunos expertos sugieren que los chips Ascend ya logran un rendimiento similar a los de NVIDIA A100, aunque las restricciones de Estados Unidos también han prohibido que TSMC fabrique estos chips.