En la actualidad, China es considerada una potencia mundial pionera en seguridad y tecnología que hace poco se convirtió en el primer país en lanzar un satélite 6G al espacio. Sin embargo, el exceso de vigilancia parece preocupar a los ciudadanos, quienes decidieron unirse a un plan para tratar de evitar la gran cantidad de cámaras de la Happiness Avenue de Beijing.
Participantes de experimento tratan de evitar las cámaras de Beijing
La vigilancia de las ciudades es uno de los temas de mayor preocupación del gobierno chino, de hecho en el año 2018 contaban con más de doscientos millones de cámaras distribuidas por todo el país. Además, «el próximo año se estima que la cifra de cámaras ascienda a 560 millones, con un equivalente de 1 cámara por cada 2,4 ciudadanos», ha explicado Wall Street Journal.
Esta situación ha generado opiniones contrarias entre los ciudadanos, ya que algunos apuestan por la seguridad mientras que otros cuestionan el efecto que esto tiene en su privacidad. Prueba de ello es el artista Deng Yufeng, quien a finales de octubre decidió lanzarse a las calles junto a un grupo de personas para tratar de evitar las cámaras de Beijing.
Deng y una fila de participantes sorprendieron a los ciudadanos de la capital china al caminar con chalecos reflectantes por toda la Happiness Avenue. Los curiosos pudieron captar como durante dos horas el grupo de personas se agachaban, inclinaban la cabeza y se desplazaban lenta y sigilosamente por todo el lugar.
Para su proyecto, el artista asiático no solo tuvo que medir con un telémetro el largo y ancho de todo el lugar, sino además identificar todas las cámaras de vigilancia de la Happiness Avenue y su respectivo rango de monitoreo. Como resultado solo algunas caras quedaron ocultas, puesto que fue muy difícil ocultarse en su totalidad.
«Fue más difícil de lo que esperaba, pensé que sólo había unas pocas cámaras y que podía agacharme y cubrirme fácilmente, pero resultó no ser el caso en absoluto. Las cámaras estaban realmente por todos lados y era imposible evadirlas».
Deng Yufeng
Deng intenta sensibilizar sobre la privacidad y la seguridad
Esta no es la primera vez que el artista chino realiza este tipo de hazañas para crear conciencia de la privacidad y vigilancia. De hecho, en 2018 Deng compró en el mercado negro y exhibió en el museo de Wuhan los datos de 300.000 ciudadanos. Sin embargo, al mudarse este año a Beijing notó la excesiva seguridad de monitoreo en la capital.
«Estas cámaras representan el poder del gobierno y su ‘intrusión’ en la vida de los ciudadanos. La mayoría de la gente probablemente esté acostumbrada a las cámaras en la calle, pero yo sigo prestando atención inconscientemente»
Deng Yufeng
Para los ciudadanos de Beijing el tratar de evitar las cámaras pudo resultar una actividad bastante curiosa y entretenida. Sin embargo, la vigilancia de las calles no deja de ser vital para el gobierno chino, que en 2018 logró disminuir su tasa de homicidios diez veces más que EE.UU.
Vía BBC
