Internet es un arma de doble filo, esta es quizás una de las frases que más escuchamos cuando escuchamos hablar de una tecnología que ha cambiado de forma radical nuestras vidas. A día de hoy, resulta imposible encontrar a cualquier persona que no guarde algún tipo de información en la red, pero seguimos sin ser conscientes de la importancia de la seguridad informática para nuestro día a día.
Los riesgos de seguridad informática no paran de aumentar de forma exponencial
Parece algo de película, pero los ataques informáticos están a la orden del día y no terminamos de ser conscientes de ello. Cuando hablamos de riesgos de seguridad informática, pensamos que es un problema que tan solo puede afectar a las grandes empresas, y que en ningún caso puede afectar a un usuario medio que consuma servicios de la red de forma habitual.
Almacenar datos en servicios en la nube como iCloud o Google Drive, guardar datos financieros en navegadores, almacenar las credenciales de tu correo electrónico en cualquier dispositivo… Procedimientos que hacemos a la orden del día, y que suponen un enorme riesgo que no terminamos de asumir como consumidores de Internet.
Pero los datos empiezan a ser preocupantes, si no lo eran ya, ya que informes elaborados por Cybersecurity Ventures aseguran que durante este año cerca de un 90% de las empresas que utilizan Internet tendrán un elevado riesgo de sufrir un ataque que vulnere su seguridad informática, y en la mayoría de los casos ni si quiera serán conscientes de que esto está ocurriendo.
Y la prueba irrefutable de que esto es algo que preocupa a los especialistas de este sector está en la cantidad de ofertas de trabajo que podemos encontrar relacionadas con la ciberseguridad. Es un hecho contrastado que a día de hoy faltan especialistas para parar la cantidad de ataques que sufrimos, y más cuando los propios usuarios afectados somos los que menos contribuimos a la hora de asegurar nuestros datos.
¿Cómo puedo poner mi granito de arena para evitar ser atacado, y ayudar a prevenir ataques a los demás?
Aunque parezca mentira, los propios usuarios somos los que más podemos ayudar en términos de seguridad informática, y basta con concienciarnos un poco del serio problema que supone este tema. A día de hoy, cerca del 91% de los ataques que recibimos los usuarios con acceso a Internet tienen lugar utilizando una técnica denominada «phising».
Este es el método más sencillo que emplean los cibercriminales para robar contraseñas, pero hay cientos de ataques diferentes a los que nos exponemos día sí y día también. Pero tratar de protegernos no cuesta tanto…
Basta con ser conscientes del peligro que conlleva esta herramienta para tratar de asegurar nuestros datos. Utilizar un buen antivirus como Bitdefender, aunque nos suponga un precio algo elevado es algo que merece la pena, y por supuesto asegurar nuestras contraseñas cambiándolas de forma periódica son algunas de las medidas que podemos tomar para prevenir ataques informáticos.
Aunque la seguridad informática representa un enorme riesgo para nuestros datos, ya sean datos personales, información financiera o datos de nuestra empresa, basta con ser algo precavido para estar tranquilos en un mundo que tratará de robarnos información durante el más mínimo descuido.
Fuente: Cibersecurity Ventures
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