La IA generativa se ha convertido en una máquina de generar desinformación a escala global. Un informe de Freedom House revela que al menos 16 países han utilizado sistemas de IA generativa para sembrar dudas, desprestigiar a sus adversarios y manipular el debate público. Esta preocupante tendencia está socavando la libertad en internet en todo el mundo.
La desinformación en Internet y la nueva era de la IA
En un mundo donde la IA generativa ha proliferado, ejemplos de censura y restricciones a la libertad en internet son cada vez más comunes. En China, por ejemplo, existe una herramienta desarrollada por Baidu que permite generar imágenes a partir de un ‘prompt’, pero ciertas palabras y contenidos políticos sensibles son censurados.
Así mismo, en Irán el acceso a las redes móviles fue bloqueado en 2022, restringiendo drásticamente el uso de aplicaciones como WhatsApp e Instagram. En Birmania, las restricciones a internet se han vuelto tan severas que el país se acerca al nivel de censura de China. Esta escalada en la censura y la represión de la libertad en internet ha llevado a una era peligrosa de la IA generativa.
El informe anual de Freedom House destaca que la libertad en internet ha disminuido durante los últimos 13 años consecutivos, y la IA generativa desempeña un papel clave en esta tendencia. Esta tecnología ha permitido el fácil acceso a herramientas de desinformación y censura en línea.
Los sistemas automatizados pueden orquestar campañas de desinformación altamente precisas y sutilmente diseñadas. Como resultado, al menos 16 países han utilizado estas tecnologías para socavar la libertad en internet.
El informe también revela que al menos 47 gobiernos han empleado expertos para manipular debates en línea a su favor, el doble de lo que hacían hace una década. Algunos países han implementado marcos legales que obligan o incentivan a las plataformas digitales a utilizar aprendizaje automático para eliminar el discurso político, social y religioso que consideren desfavorable.
Este fenómeno no se limita a países autoritarios, ya que incluso en entornos democráticos como Estados Unidos y Europa, se han planteado restricciones al acceso a sitios web y redes sociales para controlar disturbios y protestas.
El «Dividendo del Mentiroso» y la desconfianza en la Información
El fácil acceso a las herramientas de IA generativa ha dado lugar a lo que se conoce como el «dividendo del mentiroso». Esto significa que la gente se muestra más escéptica ante la información veraz, especialmente en tiempos de crisis o conflictos políticos, cuando la información falsa tiende a proliferar. La desinformación orquestada por IA socava la confianza en hechos verificables y mina la integridad de la información.
A medida que la IA generativa se convierte en un instrumento poderoso para la desinformación, proteger la integridad de la información y la libertad en internet se vuelve fundamental. Los gobiernos, las organizaciones y las plataformas en línea deben tomar medidas para identificar y abordar esta amenaza. La tecnología debe utilizarse de manera ética y transparente, y es imperativo educar al público sobre cómo detectar y resistir la desinformación.